miércoles, 6 de junio de 2012

Capítulo CLXXXVII. Mineros (1). Que explica cómo las entrañas de la tierra se confunden con las entrañas de los hombres, y el coraje de los hombres se confunde con las lágrimas de la tierra. Lágrimas de incomprensión, hastío y pena.

No es homenaje, sino justicia. 

La foto, alineada a la izquierda,
como no podía ser de otra forma.

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